Si bien el impuesto de sociedades o el impuesto sobre beneficios es uno de los tributos más conocidos por parte de los empresarios y responsables de negocios de empresas que operan en el territorio español, es importante ser conocedor del método para el cálculo de la cuantía que éstas deben pagar.
En este post, vamos a hablar sobre el impuesto sobre el beneficio, con el objetivo de ser conocedor de todo lo necesario para su correcto cálculo, pago y cumplimentación.
¿Qué es el impuesto de sociedades o el impuesto sobre beneficios?
El impuesto sobre los beneficios, comúnmente conocido como impuesto de sociedades o IS es un impuesto directo que se encarga de gravar las rentas producidas por parte de las empresas o personalidades jurídicas que operan o realizan su actividad económica dentro del territorio español.
De algún modo, sería el equivalente al IRPF, estando este centrado en gravar las rentas de las personas físicas, el IS o impuesto de sociedades estaría centrado en gravar las rentas de las personas jurídicas.
La cuantía a satisfacer por parte de las empresas en este impuesto se obtiene de la aplicación de un tipo impositivo sobre el beneficio obtenido por parte de la empresa en un periodo determinado (que suele ser el ejercicio contable anual), que se obtiene a través del resultado contable, fruto del resultado de la cuenta de pérdidas y ganancias.
¿Cuándo deben presentar las empresas el impuesto de sociedades o beneficios?
El IS o impuesto de sociedades en España se presenta dentro de los 25 días naturales tras los 6 meses posteriores al cierre del ejercicio contable de la empresa.
Por norma general, para el territorio español, si el cierre del ejercicio contable de nuestra empresa coincide con el fin del año natural, la presentación del IS suele realizarse entre los días 1 y 25 de julio de cada año.
Los diferentes tipos impositivos aplicables en el impuesto de beneficios
Como hemos comentado con anterioridad, para calcular el impuesto sobre el beneficio, debemos aplicar un tipo impositivo (en forma de porcentaje) sobre el resultado de la cuenta de pérdidas y ganancias. Por norma general, los tipos impositivos son los siguientes:
- El tipo impositivo general aplicable a las empresas que operan dentro del territorio español es del 25%.
- Para el caso de entidades sin ánimo de lucro, el tipo impositivo aplicable se reduce al 10%.
- En el caso de las cooperativas fiscales, estas disfrutan de un tipo impositivo algo menor, del 20%.
- Para las empresas o entidades de nueva creación, estas disfrutan de un periodo de 2 años con un tipo impositivo reducido del 15%.
¿Cómo se calcula la cuantía del impuesto sobre los beneficios?
Para poder calcular la cuantía del impuesto sobre los beneficios, tenemos que fijarnos en el resultado contable de nuestro ejercicio, particularmente en la cuenta de pérdidas y ganancias.
Su resultado nos indicará los beneficios obtenidos por parte de la empresa a lo largo del año contable, que en este caso sería la base imponible, cuantía a la que tendremos que aplicar el tipo impositivo que le corresponda a nuestra empresa para hallar la cuantía del impuesto a sufragar.
No obstante, antes de aplicar el tipo impositivo a la base imponible, tendremos que tener en cuenta los siguientes casos:
- El resultado contable debe ajustarse en base a aquellas partidas que no forman parte de la base imponible, como por ejemplo las donaciones, multas o pago de otras situaciones similares.
- Tendremos que tener en cuenta la existencia de bases imponibles negativas de resultados contables con pérdidas en ejercicios anteriores, pues estas pueden compensarse con la base imponible actual.
- Una vez hemos aplicado todas las deducciones y bonificaciones, podremos aplicar el tipo impositivo sobre nuestra base imponible para hallar la cuota a pagar del impuesto.